Infecciones de orina en la menopausia

¿Has entrado ya en la menopausia y te has dado cuenta de que aparte de otros síntomas también tienes más infecciones de orina?

Hoy me gustaría hablar de la importancia de hacer una revisión de suelo pélvico y cómo esto está relacionado directamente con las cistitis o infecciones de orina.

El papel de los estrógenos:

Los estrógenos juegan un papel muy importante en la salud general de la mujer:

  • Disminuyen la presión arterial
  • Controlan el colesterol
  • Protegen los huesos
  • Intervienen en el metabolismo de las grasas..

Pero también tienen un papel muy específico en la pelvis:

  • Mantienen una adecuada salud de la flora bacteriana vaginal
  • Regulan la hidratación de la mucosa
  • Mantienen la elasticidad de los tejidos
  • Ayudan a una correcta vascularización de la zona.
  • Hacen que el colágeno esté bien hidratado y “turgente”.

Cuando los estrógenos desaparecen, estas funciones empiezan a ser más deficientes y si había algún otro problema de suelo pélvico asociado… puede ser un factor desencadenante de las infecciones de orina. 

La triada de las infecciones de orina en la menopausia:

La menopausia en sí no es una causa de infecciones de orina, pero si se suma a otros factores, estas sí pueden aparecer.

Me explico: imagina que partimos de una disminución de la flora vaginal que nos protege de infecciones. Esto está causado por la disminución de estrógenos propia de la menopausia. Pero imagina que además, la mucosa está alterada y poco hidratada. 

Puede ocurrir además que tengas un pequeño prolapso de vejiga, aunque puede aparecer en cualquier época de la vida, durante la menopausia son más frecuentes o en grados más avanzados por la pérdida de turgencia de los tejidos. 

Este descenso hace que la “salida” de la orina, quede más alta que el fondo de la vejiga… así que si dejamos un poco de residuo cuando orinamos, la posibilidad de infección aumenta. 

Si llegamos a la menopausia con pérdidas de orina, la misma pérdida de orina y el uso de absorbentes puede irritar la zona, lo que sumado la humedad mantenida, hace un caldo de cultivo maravilloso para la aparición de infecciones. 

Como ves, si durante la menopausia revisas y tratas el suelo pélvico, y eliminas la incontinencia urinaria y reeducas el prolapso… quitamos dos de los tres elementos de la triada de las infecciones de orina. Por lo tanto, reducimos su aparición o su frecuencia.

Además de con la prevención de las infecciones de orina, el tratamiento con fisioterapia de suelo pélvico te puede ayudar con otros síntomas como la sequedad, el dolor en relaciones, la disminución del placer… 

Si no lo has hecho antes….¡La menopausia es un momento perfecto para que pongas a punto tu suelo pélvico!

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